Reflexiones y aportes a la investigación de los artistas formadores del área de Música.

La música como formación transversal para la convivencia

Después de los procesos de muestras y de una necesaria reunión de agradecimiento con todos los artistas que conformaron el equipo de trabajo de la Asociación Lyndon LaRouche en los cuatro colegios José Martí, Ricaurte, Eduardo Santos y Tomas Carrasquilla, donde atendimos a niños y niñas que hacen parte del programa CLAN, los artistas formadores formularon por escrito sus reflexiones pedagógicas producto de las reuniones donde se  socializaron los procesos realizados. Estos aportes a la investigación dan luces a las realidades vividas por cada uno de los artistas formadores en los colegios o en los CLAN donde compartieron con los grupos de estudiantes.

COLEGIO JOSÉ MARTÍ CURSO 603

ARTISTA FORMADOR: CRISTIAN CIFUENTES

 Soy Músico profesional egresado de la Facultad de Artes ASAB con énfasis en guitarra acústica, becada 3 veces de manera consecutiva por la fundación Artística Gentil Montaña. Durante las presentaciones realizadas en las muestras finales de semestre, teniendo como miembro del jurado en todas las ocasiones al maestro Gentil Montaña.

Llegue al proceso como artista formador con experiencia en academias y en proyectos financiados por secretaria de cultura entre otros, por lo cual este proyecto resulto ser una gran experiencia desde lo personal como también profesional, ya que enseñar a este tipo de población representa un reto mayor por mantener el orden y la atención durante la realización de las clases, generalmente los estudiantes no toman la clase de música con la seriedad y lo ven como un espacio recreativo en el cual ellos participan o simplemente sino quieren no lo hacen, esto se debe a que hay poco estimulo  por parte del colegio y de su entorno, por ejemplo la materia de música no está dentro del pensum del Colegio en algunos de los casos.

El grupo con que se trabajo fue el grado 603 con 33 estudiantes de edades similares entre los 11 y 14 años, con muchos problemas de indisciplina, algunos de ellos tenían matricula condicional, y mostraban cierto descuido en cuanto a la presentación personal, muchos tenían dificultades en la escritura, y utilizaban un lenguaje hostil entre ellos.

Los contenidos que se lograron trabajar en las clases de manera cronológica fueron los siguientes:

-El Valor relativo fue un tema que se explicó para que los  estudiantes pudieran comprender la manera de distribuir los pulsos por compases, y pudieran identificar las métricas más utilizadas.

-Lectura rítmica de compases simples en primera división y el ritmo-lenguaje se practicó utilizando la voz y el pulso marcando con las manos, y la otra manera fue diciendo el pulso con la voz y realizando el ritmo con las palmas, se trabajó el contratiempo en la primera división del pulso en compás de 4/4  posteriormente se relacionaron los ritmos con palabras, por ejemplo; para hacer negras se escribían palabras monosílabas y para corcheas se utilizaron palabras bisílabas, creando frases sin un contexto entre las palabras.

-Se hizo una breve explicación de cómo se enumera los espacios y las líneas del pentagrama, como también el uso de las líneas adicionales inferiores y superiores para los diferentes registros.

-Lectura rezada en clave de sol haciendo ejercicios en ritmo de negras continuas y utilizando solo 3 notas diferentes en grado conjunto en los diferentes registros, posteriormente se realizaron algunos ejercicios de lectura entonada utilizando solo las notas de la triada de Fa mayor.

Con la llegada de los instrumentos (10 flautas dulces y 2 guitarras) gracias a la gestión de la Asociación Lyndon LaRouche, cambió la dinámica de la clase por lo que la labor se enfocó en que ellos pudieran aprender a tocar los instrumentos ya que era la mayor  motivación, por lo cual se propusieron dos temas para trabajar para la muestra final el tema de “Flaca” de Andrés Calamaro y el tema “Ins´t She lovely” de Stevie Wonder.

-Se transcribieron los diagramas de las posiciones de las notas musicales en la flauta de la escala natural (Do mayor) y se practicó tocar la escala de do mayor hasta la quinta justa una octava arriba comenzando con la nota más grave en la flauta. Posteriormente se le dio una manera más sencilla de ver los diagramas simplemente teniendo en cuenta la cantidad de dedos para cada posición, se aprendió el orden de las notas de manera ascendente por grado conjunto y se escribía la cantidad de dedos para cada nota teniendo en cuenta el agujero de la parte posterior de la flauta, mediante un símbolo pero sin tener en cuenta este para la numeración, es decir que se enumeraba de esta manera Do 7 dedos, Re 6 dedos, Mi 5 dedos, Fa 4 dedos, Sol 3 dedos, La 2 dedos, Si 1 dedo, Do octava arriba 1 dedo B, Re octava arriba 2 dedos B, entre otros de esta manera se diferenciaba y se reconocían por cantidad de dedos.

-Práctica de las melodías propuestas solfeando las notas de manera entonada agrupando por frases, señalando el fraseo y asegurándose de que ellos aprendieran de memoria cada frase mientras se tocaban en la flauta y en la guitarra, que a diferencia de la flauta se realizó de manera simultánea tocar y cantar las notas, por lo cual la mayoría de estudiantes pudieron memorizar algunas notas en el diapasón y en la flauta.

-Estudio intensivo de las frases que presentaron mayor dificultad a los estudiantes, se hizo tocando en  diferentes tempos comenzando lento, fuerte y parejo cada nota hasta llevarlo a un pulso incluso mayor al tempo original de las canciones.

-Lectura de la melodía de la introducción del tema “flaca” utilizando un esquema que relaciona por medio del color (amarillo, azul y rojo) las notas musicales en el pentagrama con las notas en el diapasón, por medio de esta metodología y en este orden se desarrolló;

1- se piden que identifiquen la nota más aguda y la nota más grave de la melodía para analizar el rango en el cual la melodía se lleva a cabo.

2- se escriben o se resaltan estas notas en el diapasón dibujando en el tablero únicamente las notas que debemos utilizar.

3- se identifican estas en el diapasón de la guitarra guiando el lugar, mencionando a manera de pregunta o en algunos casos respondiendo ¿en qué traste y en que cuerda hay que pisar para tocar X nota del pentagrama?, se practicó dando algunas reglas de digitación o bases técnicas para la ejecución de las cuerdas y algunos ejercicios motrices simples para desarrollar una sincronía en ambas manos. Posteriormente se practica por frases cantando o de manera rezada solfeando las notas al mismo tiempo, y con mayor repetición con las frases que generaban mayor dificultad, para mecanizar y fortalecer la memoria muscular.

4- el ritmo de las melodías ya que fueron ritmos complejos se aprendió de manera automática por medio de la imitación.

-Se trabajaron los siguientes acordes Sol mayor, Si mayor con séptima menor, Mi menor, Do mayor con séptima mayor, Re mayor con séptima menor, La mayor con séptima menor, Re sus 2 con séptima menor. Mediante diagramas que se dibujaron en el tablero haciendo una explicación general dirigida a todos de cómo se enumeran las cuerdas, los trastes y los dedos de la mano que digita en el diapasón. Los acordes se practicaron en el orden de la progresión utilizada en la canción “Ins´t she lovely”.

Las guitarras se comparten en determinados tiempos mediante turnos ya que solo se contaban con dos guitarras y algunos días con tres contando con el instrumento del artista formador que llevo para algunas clases.

-El proceso de aprendizaje musical durante el segundo semestre del año dejo muchas enseñanzas en medio de las dificultades, en cuanto a la manera de compartir el conocimiento con los estudiantes y de cómo tratar aquellos problemas de indisciplina de una manera más equilibrada y no seguir los conductos regulares que por lo general, con lleva a entrar en un conflicto mayor ya que genera un desgaste mayor para el artista formador.

El poder encontrar mecanismos de aprendizaje y comunicación que simplifiquen o hagan ver los ejercicios planteados de una manera más fácil y sencilla, produce que se incremente la participación de los niños y esto sucede al momento de improvisar en la clase, cuando lo que se tenía preparado para trabajar no resulta ser lo esperado para ellos, es en ese momento en el cual el docente de manera espontánea con base en la experiencia fallida trabaja sobre esta para obtener una nueva fórmula de enseñanza que genera que ellos se sientan motivados, esta nueva información para

enseñar a un grupo particular de estudiantes es la pedagogía y resulta ser un tesoro para el artista formador.

El colegio José Martí alberga niños de estratos vulnerables donde hay un ambiente de agresividad y poco respeto entre ellos, bajo esa perspectiva el artista formador entra en escena para sembrar por medio de la música un poco de paz y de amor, siendo este el argumento para que el arte sea valorado como un regenerador que despierta el pensamiento emotivo vital para el desarrollo de la personalidad.

Pienso también que se pueden integrar otras  maneras más internas para lograr cambios en la conducta de los niños, en mi experiencia personal la enseñanza de la meditación puede ser una alternativa para generar mejores resultados, teniendo como base la respiración como punto de partida para lograr una manera consciente de percepción del cuerpo, la mente y el corazón, esta sensibilización puede generar un cambio positivo en la conducta,  se ha logrado comprobar bajo unos estudios realizados en el programa de Edward Punset con niños de un Colegio en España ver link:   https://www.youtube.com/watch?v=b4M2Nhx3O18

Se concluye que estas prácticas mejoran el aprendizaje, la atención, y la conducta de los niños, ya que se vuelven más compasivos y pacíficos, siendo estas  virtudes fundamentales para poder tener un ambiente de comunicación y de respeto entre ellos y con el docente durante una clase.

Por otro lado es importante que en las clases de música los estudiantes experimenten con varios instrumentos, y puedan decidir por un instrumento con el cual sientan mayor empatía, ya que no todos los niños les gusta tocar la flauta dulce para aprender música por ejemplo, por lo cual es normal que muchos no se sientan motivados a aprender por más que el docente los incentive a diario.

Es importante que el colegio invierta en la compra de instrumentos mediante proyectos o gestión ya que si el lugar esta sin recursos ni apoyo es difícil generar un aprendizaje profundo de la música, sin el brazo del instrumento como herramienta y oráculo con el mundo de la música. Por lo que es importante que el Colegio incentive el arte y el aprendizaje de la música y la mejor manera de esto es mediante las acciones expuestas anteriormente, esto permitirá que  el colegio tenga su banda marcial, sus agrupaciones y que musicalice los eventos que realizan durante el año.

Creando seres sensibles a través del lenguaje de la Música 

COLEGIO EDUARDO SANTOS

ARTISTA FORMADOR: JUAN CAMILO SÁNCHEZ LOAIZA

ÁREA ARTÍSTICA: MÚSICA

Mi  interés por la música surge a partir de la relación que tuve cuando niño con este lenguaje artístico. En el colegio tuve la oportunidad de recibir unas pequeñas clases que fueron la semilla de inicio, para que yo pudiera apasionarme por la música y continuar por ese camino.

Con la música pude encontrarme conmigo mismo, pude fortalecer mi forma de expresarme he podido desarrollar una forma diferente de comunicarme con el entorno. Alrededor de la música, puedo ver los cambios que este lenguaje genera en las personas, observo que la forma de pensar y entender el mundo de las personas que tienen relación con el lenguaje del arte es diferente permite  una sensibilidad más abierta y entender el entorno de otra forma.

Es ahí donde comienzo a pensar en la posibilidad de aprender a relacionar este lenguaje artístico con la enseñanza para generar cambios en la vida de sujetos que tuvieran la necesidad de encontrar una nueva forma de entender sus contextos y  ser generadores de cambios dentro y fuera de ellos.

El arte en cualquiera de sus formas de expresión es sin duda la manera en la que el ser humano establece relaciones sensibles con sus mundos y a través de este lenguaje los transforma.  Algo que es de vital importancia, no solo saber realizar expresiones artísticas que cambien a otros sino compartir el conocimiento para que otros aprendan a expresarse a través del arte. Un conocimiento no cobra sentido sino hasta cuando se expande, transforma y genera cambios significativos en los individuos a partir de una semilla que se siembra y se trabaja con dedicación y esmero; esta razón me llevo no solo a ser un sujeto que se relacionaba con el arte por medio de la música, sino a ser un sujeto que enseñaba a los demás a relacionarse con ese lenguaje que permite llevar al ser humano a soñar, imagina, pensar etc.

Para el año 2015 tuve el grupo de música 3 del colegio Eduardo Santos en las horas de la tarde los martes y jueves. Para el primer semestre de  este año se me asigno un grupo con 38 estudiantes con los que se intentó trabajar de una manera dinámica, amena y lúdica, esta propuesta fue aceptada por el grupo de una manera acertada, sin embargo la cantidad de estudiantes en el grupo imposibilitaba el proceso normal de las clases; los estudiantes no respetaban los espacios establecidos y un grupo de 8 estudiantes presentaban actitudes de irrespeto hacia el profesor y hacia sus compañeros.

En primera instancia note que los estudiantes carecían de autocontrol y estaban acostumbrados a recibir órdenes, por lo que no se veían con iniciativa para proponer elementos que fortalecieran el desarrollo de la clase, sin embargo, pude notar que también habían algunos  estudiantes que trabajaban  y se comprometían con la clase de una manera especial, en ellos se notaba un gusto por la música. Este primer semestre por los contratiempos y demás, fue poco lo que se logró ya que el desorden del grupo de estudiantes indisciplinados era tal, que entorpecía los procesos que se llevaban normalmente; aunque se buscaron diferentes modos y herramientas por parte del docente para involucrar a estos estudiantes a la clase, fue  complicado llegar a hacerlo, pues aunque en algunos momentos participaban de la clase, no llegaron a ser constantes para realizar un aprendizaje que se les grabara en el interior.

Para el segundo semestre del mismo año, el grupo se redujo a la mitad, la mayoría de estudiantes se cambiaron a otras áreas artísticas. Para este semestre llegaron nuevos estudiantes quienes manifestaron su anhelo de aprender música, y algunos continuaron con el proceso con el que ya habían empezado a desarrollar en esta área. Desde el inicio se plantearon unos objetivos y se llegaron a algunos acuerdos entre el artista formador y los estudiantes, estos acuerdos se cumplieron a cabalidad, superando inclusive las expectativas del docente.

El trabajo para el segundo semestre fue dinámico y se trabajó con alegría disfrutando cada cosa que se aprendía, esto también lo dio el número de estudiantes que integraban el grupo ya que eran 16, pues posibilitó un trabajo más personalizado por parte del docente quien motivaba al estudiante a esforzarse más y a autocorregirse cuando se realizaba un ejercicio; el estudiante se sintió más importante al ver que se le prestaba más atención. Esto me lleva a concluir que los estudiantes de grupos que se conforman para una clase de música, si quieren establecer bases musicales claras y sólidas, no deben ser  muy grandes pues es importante tener un trabajo en el que se haga un seguimiento significativo a cada estudiante y haya tiempo para la corrección y la repetición en el proceso de aprendizaje; esto obviamente es más difícil con un grupo amplio. Los logros que alcanzaron con este grupo fueron buenos; los estudiantes aprendieron y se fortalecieron en conocimientos importantes en la música, además de interesarse por este lenguaje artístico e interiorizarlo en sus vidas.

Los contenidos planteados para el curso de música tres se basaron en  formar bases sólidas en los estudiantes para que a partir de ellas se generara interés y gusto por el lenguaje musical. En el primer semestre del año 2015, se planteó un trabajo rítmico corporal, tomando como base los ritmos típicos de la región del caribe, la razón de esta selección del contenido tuvo su base en buscar elementos musicales que se acercaran a lo que los estudiantes escuchan en su cotidianidad; una tambora un tambor alegre fueron sin duda estímulos que los  llevaron a interesarse por querer aprender a tocar esos instrumentos además de su sonido y los ritmos en que estos instrumentos se podían interpretar.

La percusión corporal también ayudo a establecer una relación cuerpo-música y propició un acercamiento amplio a los ritmos urbanos. Fueron pocos los momentos en los que esto aprendizajes se dieron, pues el grupo se veía afectado por la indisciplina y el irrespeto de parte de  los estudiantes.  Afecto que el grupo fuera tan numeroso ya que los instrumentos que se tenían no eran suficientes todos lo que  llevaba a los estudiantes indisciplinados a generar caos en el aula de clase.

Para el segundo semestre nos asignaron a un clan distinto. Algunos estudiantes decidieron continuar con el proceso y otros llegaban  nuevos, lo que permitió un trabajo rítmico  con las bases para arriesgarse a explorar nuevas rutas musicales. La dinámica del grupo era distinta, los avances que se dieron las primeras semanas fueron significativos; los estudiantes ya leían una partitura rítmica y entendían el valor de cada figura musical.

En una reunión de artistas formadores se plantea la idea de realizar un trabajo conjunto en torno al flamenco (su música, danza y cultura), así que se establecieron grupos entre los AF de cada clan para generar un proceso de sensibilización de este lenguaje musical. En el clan LA PEPITA el grupo establecido era conformado por la profesora Olga Díaz, el profesor Leonardo y yo, buscábamos la manera de generar espacios para empapar a los estudiantes de este lenguaje artístico y llegar a enamorarlos. Ese objetivo se cumplió en su totalidad, luego de esta primera etapa, el trabajo se enfocó en aprender a tocar la guitarra para realizar el montaje de una rumba flamenca, todos los estudiantes se mostraron motivados y se comprometieron a practicar.

La dificultad que tuvo el proceso de aprendizaje en torno al instrumento era el no acceso por parte de los estudiantes al instrumento en los espacios distintos al clan. Sin embargo el compromiso que mostro el grupo fue total, ya que seguían las instrucciones del AF y lograban avanzar de una manera rápida, paralelo a eso se llevó un proceso de aprendizaje que una estudiante en torno al piano y finalizando el curso otro estudiante tuvo un acercamiento al bajo.

Los logros obtenidos con este grupo fueron más allá de lo musical, que a mi modo de ver es lo más valioso; los estudiantes aprendieron a ser sujetos críticos y respetuosos, aprendieron a trabajar en equipo a pesar de que algunos estudiantes eran de diferentes cursos se enamoraron de la música y encontraron en ella una forma de relajamiento y disfrute.

Es importante la música en el desarrollo integral de los niños y  las niñas ya que este lenguaje artístico ofrece la posibilidad de generar nuevas formas de expresión, posibilita la creatividad y la innovación.  Al realizar una improvisación los estudiantes pueden sacar toda la energía contenida a través del golpe a un cuero o de un grito en un ejercicio vocal;  la música además de ser un lenguaje expresivo también exige una rigurosidad, los estudiantes entienden que para aprender de este lenguaje, es importante la dedicación y la constancia, habilidades que para ellos son muy difíciles de adquirir por los procesos intelectuales en los que la sociedad de la tecnología los guía todo el tiempo.

Al aprender música los estudiantes aprenden a concentrarse, a trabajar en equipo, a seguir instrucciones pero también a realizar propuestas que fortalezcan un proceso de creación musical tanto grupal como individual; las habilidades cognitivas que desarrollan se fortalecen a través de la lectura de una partitura, de realizar ejercicios rítmicos siguiendo un pulso pues los lleva a tener toda  su energía y atención en lo que se realiza y lo que va a realizar.

La música es un lenguaje muy completo,  al tener una relación con él se generan sensaciones y emociones que llevan a los niños sensibilizarse hacia su entorno, la relación con el otro mejora y genera estímulos importantes ya que cuando se ven los resultados alcanzados cada estudiante entiende que el esfuerzo y la dedicación tienen sus frutos.

En este proceso se desarrollaron avances significativos en todos los niños; como grupo se logró un montaje con  guitarras, voces e instrumentos de percusión, este montaje fue resultado de un esfuerzo de cada estudiante, y cada uno según su nivel se esforzó para lograr  fortalecer el  desarrollo grupal.

Como logros grupales pudimos encontrar:

• Un fortalecimientos de las habilidades rítmicas, vocales e instrumentales en todos los integrantes del grupo
• una unión de grupo que sin duda fue importante para lograr los objetivos planteados (resalto este aspecto ya que todos los estudiantes no pertenecían al mismo curso y grado)
• el grupo género autocritica, al generar esta cualidad también se desarrolló la necesidad de ayudar al compañero para que mejorara sus habilidades.

En los procesos individuales se obtuvieron muchísimos resultados, pienso que a excepción de dos estudiantes que no volvieron a asistir, uno desde la segunda clase y el otro desde el segundo mes por razones de salud, todos los procesos fueron especiales y únicos.

Entre ellos  Fernando  y Jesús quienes se convirtieron en dos motores que impulsaron el grupo a mejorar. Eran los estudiantes más pequeños del salón. Al principio les costó adaptarse al grupo pues eran los menores, sin embargo su compromiso con la clase y con el artista formador fue tan sincero que robustecieron sus habilidades musicales y se convirtieron en unos lideres para el grupo; ellos ayudaban a corregir a sus compañeros, aportaban ideas y como no sufrían de pena estaban todo el tiempo generando a portes para fortalecer las propuestas realizadas.

Otro de los casos que quiero resaltar es el caso de la estudiante Diana Carvajal, la habilidad que tiene esta niña para la música es verdaderamente impresionante. Al principio del curso tocaba con una guitarra para zurdos en el devenir de las clases esta guitarra se dañó y nos vimos obligados a tomar guitarra para diestros; Diana aprendió a tocar con la mano derecha como lo hacía con la izquierda en media clase y se convirtió en una líder musical para todo el grupo que la reconocían como una integrante con grandes dotes para esta disciplina.

El inconveniente con Diana es que su mente está enfocada en cosas diferentes que a mi modo de ver son muy apresuradas para su edad, esto afecto un poco el proceso al final del curso pero sin embargo su compromiso con él fue siempre el mejor.

Como artista formador pienso que me apasione más por la educación artística, el proceso de 40x40 sin duda es sin duda una plataforma que le abre las puertas  al arte como eje fundamental en la formación inicial de los niños y las niñas.

El inicio del proceso sin duda fue muy difícil, en esta etapa hubo algunos momentos en los que sentí que quería renunciar ya que era imposible llegar a compartir una clase de forma completa y grata. Sin embargo la relación con otros artistas formadores y las evaluaciones que diario me hacía, me ayudaron a replantear las objetivos y las maneras de abordar las clases, esto permitió que en mi se generara un crecimiento desde la parte docente y al generar estrategias nuevas crecí como artista.

Entendí que el docente-artista no es una persona que carga todo el conocimiento y lo vierte sobre los niños para llenarlos de información, sino esa persona que motiva a los estudiantes a generar procesos creativos y sensibles a partir del conocimiento que adquiere y se va formando en una relación con un grupo de estudiantes. Como artista formador entiendo que el conocimiento se da a partir de los aportes colectivos y desde mi punto de vista esto fue lo que se logró con el grupo de música 3 del colegio Eduardo Santos, quienes tenían un sentido de pertenencia con la clase, que a pesar de los duros ensayos y la larga espera bajo el calor el día de la muestra realizaron un montaje con toda la energía y la alegría necesarias. Sin duda el aprendizaje que adquirí este año en 40x40 fue mayúsculo y especial, ya que fue un conocimiento que surgió a partir de la relación con niños únicos y creativos.

Existe un gran aporte a la educación con los talleres de formación artística, tema que no se puede dejar a un lado pues es fundamental para el desarrollo integro de los procesos en las aulas de los AF.

Algunos de los aportes son.

·         Hay una ampliación del conocimiento, esto genera un pensamiento divergente para abordar las clases desde diferentes puntos de vista.

·         El sentido de los temas que se trabajan en clase van dirigidos hacia un mismo enfoque, esto permite que todos caminen bajo un mismo propósito.

·         Los AF toman el lugar de sus estudiantes y ese cambio de roles genera un relación más profunda con ellos.

·         El conocimiento se está refrescando y actualizando para ejercitar la creatividad a la hora de proponer actividades en un aula de clases.

·          

Debo resaltar primero que el programa CLAN IDARTES, es un avance no solo a los procesos de formación artística en  el país sino a los procesos educativos en general, ya que coloca como eje fundamental la enseñanza de las artes para la formación integral de los niños en el país.

El generar estos espacios y sin dejar a un lado los procesos artísticos en los colegios e instituciones de educación formal, genera una aporte que está encaminado hacia un tema que como colombianos nos compete, como lo es el tema de la paz. Desde mi punto de vista este programa realiza un aporte significativo que sin duda se debe continuar, ya que  a partir de sus planteamientos se generan espacios de convivencia entre docentes, estudiantes y directivos en donde los actores que integran estos espacios pueden fortalecer sus relaciones a partir de los distintos lenguajes que ofrece el arte, además de entender que se está trabajando alrededor  de un lenguaje que ofrece infinitas formas de expresión a la hora de solucionar conflictos y de crear conocimiento, se generan procesos de sensibilización en torno a las dinámicas actuales por las que nuestro país atraviesa no solo desde lo político sino desde nuestro núcleo familiar que sin duda se ve afectado de manera positiva  cuando el lenguaje del arte empapa los hogar.

Es claro que el proyecto CLAN IDARTES es una iniciativa que está generando cambios positivos en el país, pienso que debería haber una mejor organización entre los colegios e idartes en pro de realizar las muestras finales  que sin lugar a dudas son una motivación para los estudiantes que hacen parte del proceso.

Este aporte lo realizo desde la experiencia que tengo como artista formador, pues note que a la hora de mostrar los procesos, algunos espacios no son prestados, o no hay transporte para desplazar a los niños etc. Y  a veces se terminan realizando las muestras finales en espacios que no favorecen los montajes lo que  termina siendo  un obstáculo en contra de los resultados obtenidos en los procesos delas clases, en este sentido  se debería mejorar.

Debo compartir mi alegría y satisfacción, al ver que estos proyectos se fortalecieron año tras año, pienso que no se debe dejar perder todo lo logrado hasta aquí sino que hay que seguirle apostando a la educación artística como ente transformador de cambios en la sociedad.

También quiero agradecer a la asociación cultural Lyndon Larouche y al clan la Pepita  por permitirme hacer parte de su grupo de trabajo, ha sido una experiencia significativa para mí como persona, artista y docente espero poder seguir haciendo parte de este proceso de cambio para la sociedad colombiana.

La música un lenguaje de emociones para compartir

COLEGIO EDUARDO SANTOS

ARTISTA FORMADOR: HUGO ALEJANDRO RUIZ

ÁREA ARTÍSTICA: MÚSICA

En los últimos 10 años me he desempeñado como músico instrumentista compositor y arreglista, como también he tenido la oportunidad de participar en equipos de creación de bandas orquestas y Big band dentro y fuera de la ciudad de Bogotá, he tenido experiencia en interpretación musical en distintos tipos de ensamble y he recibido una educación musical que va desde lo académico el jazz y la música popular latino americana, los principales maestros que han marcado mi educación musical son el maestro Diego Sánchez en la universidad Central, Jaime torres, Carlos Guzmán y Juan Guillermo Villareal de la Academia Superior de Artes de Bogotá (Asab)  también he participado de talleres con músicos internacionales como lo son Sherman Irvy y Vicent Gardner de la Lincoln Center.

A partir de mi decisión de  ser un músico tuve la oportunidad de encontrar información que merece ser compartida lo que  me llevo a querer enseñar para dirigir ese conocimiento a los demás. Hasta ese momento me había desempeñado como músico y no como pedagogo y esto me ponía un reto personal para encontrar la mejor manera de compartir mis experiencias y adentrarme en esta búsqueda y brindarle a la sociedad, agradecimiento por las oportunidades que  he tenido.

Me mude a la ciudad de Bogotá para  convertirme en músico ya que aquí se encuentra concentrado el conocimiento que llega de las distintas regiones de Colombia, la razón por la que decidí que iba a ser músico es porque la música  llenaba mi vida de buenos sentimientos, que  compartía con mis compañeros de estudio, un lenguaje de emociones que solo se podían transmitir al estar tocando un instrumento, así sentí la necesidad de aprender cómo es que funciona y se fue volviendo una prioridad en mi vida.

 Además que aparte de todo esto tenía muchas ventajas de poder viajar y llegar a las  personas de todo tipo, y a través de la música  unir a los individuos.

Durante el año 2015 estuve trabajando con dos grupos de los cuales me referiré a continuación por separado: colegio Eduardo santos , con este grupo se inició clases desde el mes de marzo, comenzó siendo un grupo de 38 niños de grados tercero, cuarto y quinto de primaria, el primer problema que se presentaba era por la cantidad de niños para cada sesión de clase y también las edades que manejaban, por lo general los grupos para hacer una iniciación musical se realizan entre 10 y 15 estudiantes por sesión de clase ya que permite atender directamente las necesidades individuales, además de que estos grupos se idealizan como más nivelados en cuanto a las edades ya que dependiendo de ello se toma alguna metodología más adecuada para el grupo.

El primer semestre de este grupo presento muchos inconvenientes en cuanto al sitio donde se recibían las clases comenzando con el clan Rafael Uribe, pasando al clan la pepita y finalizando con clases directamente en el colegio. Por lo tanto el proceso pedagógico se vio muy afectado teniendo que cambiar en muchas ocasiones el plan de trabajo y siempre estuvimos viendo temas distintos, comenzando por instrumentos de cuerda en el clan Rafael Uribe, pasando al trabajo de vientos en el clan la pepita y finalizando con un trabajo de voz en el colegio ya que en cada uno de estos sitios habían instrumentos distintos y en el último no había nada, hubo muchas cosas positivas al enfrentarnos a estos problemas y es que el grupo siempre estuvo dispuesto a trabajar sin importar el problemas que se tuviese.

Grupo del colegio José Martí:  este grupo inicio el proceso conmigo en el segundo semestre del año, se trabajaba con estudiantes de grado octavo y  noveno, y se contaba con 18 estudiantes por sesión, la dificultad que se presento es que el colegio no nos iba a prestar instrumentos para realizar las clases por lo tanto tome la decisión de enfocar todo el programa hacia la creación de instrumentos musicales, lo cual todos tomaron con mucha expectativa y animo ya que en palabras de algunos estudiantes, nunca habían tenido la oportunidad de realizar algo así.

Por lo anterior mencionado he manejado dos grupos de música con temas totalmente distintos mientras uno de ellos estaba enfocado hacia la interpretación musical, el otro estaba enfocado en la creación de instrumentos musicales por lo tanto hare una breve descripción sobre el contenido que se desarrolló en cada caso:

El grupo del colegio Eduardo santos: Durante el primer semestre se trabajó la iniciación musical enfocado a descubrir el potencial que manejaban los estudiantes de forma individual, para ello se trabajaron los modos rítmicos binarios y la lectura de figuración musical. Para ir introduciéndolos poco a poco al lenguaje musical escrito, luego pasamos a trabajar con los instrumentos de cuerda pulsada donde estábamos trabajando los modos rítmicos y los tres tipos de rasgados en el instrumento. Cuando cambiamos al clan la pepita decidí hacer un trabajo con instrumentos de viento pero no alcanzo a pasar de la introducción al tema y de ver algunos videos musicales relacionados y por ultimo al llegar a las clases en el colegio tuvimos que trabajar la voz haciendo un taller de creación de letras y de interpretación de temas conocidos.

Para el segundo semestre se inició directamente con instrumentos de vientos, en este semestre llegaron muchos estudiantes nuevos, así que se procedió con una iniciación musical al mismo tiempo que se trabajaba con la iniciación instrumental, pasamos a ver las bases técnicas y luego ejercicios de sonoridad grupal y por ultimo tomamos la improvisación como tema principal de ensamble, realizamos un montaje sobre la forma blues donde los estudiantes realizaban un background e improvisaciones y el tema terminaría cuando todos ellos hubieran podido realizar un solo.

El grupo del colegio José martí: Los temas trabajados durante el semestre fueron, la producción de sonido desde distintos materiales, se trabajó al principio con botellas de vidrio y agua y dos maneras de crear sonido, el viento y la percusión del material. Se estuvieron tratando temas de acústica que en su momento servía como apoyo a temas vistos en matemáticas, luego dedicamos gran parte del semestre a crear instrumentos de viento con elementos cotidianos el más destacado fue el pitillo el cual nos permitía crear una gran variedad de efectos. Luego de estar realizando estas bases, comenzamos nuestro tema más importante del semestre, en la creación de un palo de agua de gran tamaño comenzado totalmente desde cero y finalizado con un trabajo de decoración  con temperas.

La música aporta a la formación de lasos de amistad entre las personas, por eso lo que más pude ver durante mi trabajo fue como los grupos se unían y compartían entre ellos y conmigo mismo muchas cosas, se creó un ambiente donde usábamos la música como una excusa para reunirnos y compartirles a los demás nuestro miedos tristezas felicidades y anécdotas, en muchos momentos tuve que brindar consejos y apoyo a mis estudiantes y en muchos otros ellos comprendían que yo era un ser humano que podía cometer errores pero entre todos podíamos apoyarnos. Por eso creo que la música es importante para poder desarrollar en las personas una sensibilidad mucho mayor con respecto a relacionarse con los demás.

En los grupos cada estudiante aprendió a realizar una actividad, ya fuese tocar un instrumento o crearlo, aprendió a seguir unos pasos y ordenar la forma de realizar las tareas pero lo más importante fue que todo lo que aprendían lo compartían con los demás cuando alguien tenía una dificultad y había alguien que ya había resuelto algún problema venía a compartir la forma en que lo hacía  de una forma desinteresada, aprendieron a valorar su trabajo en grupo, como por ejemplo en el trabajo del blues y la improvisación, yo comenzaba a tocar los acordes y a improvisar ritmos con la voz a manera de ejemplo que luego cada uno de los estudiantes tendría que seguir, pero todos tenían miedo y pena en el primer intento, ya que sentían que lo harían mal, pero para la segunda vez todos cambiamos a forma de verlo ya que comprendíamos que todos teníamos la misma inseguridad y que lo mejor era apoyarnos entonces en la siguiente improvisación muchos se levantaban y bailaban o imaginaban que tenían un instrumento y que lo tocaban, como si estuvieran en un concierto empezamos a jugar con lo que antes generaba miedo, después de eso lo único que faltaba era pasar todo eso que se vivió con la voz a un instrumento musical.

Como lo mencionaba anteriormente, nunca me había desempeñado de manera pedagógica dentro de la música por lo tanto cada vez que estaba en el salón de clase, era un aprendizaje nuevo como sentir que el grupo se contagiaba de mi estado de ánimo y que para ser un mejor profesor tenia que tomar mucho control de mis propias emocione para dar el ejemplo  a mis estudiantes de una manera positiva.

 Hubo muchas ocasiones en las que sentía que no iba a poder realizar el trabajo y quería dejarlo pero al final supe que todo lo que se hiso valía la pena, ya que estos grupos fueron muy agradecidos conmigo y  es el mejor regalo que he podido tener en este proceso.

-          Uno de los aportes más importantes que brindan las artes a la pedagogía tiene que ver con liberar la mente y sumergir a los estudiantes en que siempre hay muchas posibilidades para realizar las cosas, aprenden a resolver problemas y a ser más creativos.

-          Por medio de los talleres se complementan no solo las materias que ven en la escuela sino que se le brindan herramientas que en muchos casos no se pueden conseguir con la educación tradicional.

-          Se pasa de estar viendo el mundo de manera teórica a tener experiencias prácticas lo cual es mucho más provechoso, ya que la teoría se olvida fácil pero las vivencias no.

-          Se le brinda la posibilidad a los estudiantes de elegir libremente como expresarse de otras maneras y como tener un código ético personal para el trato a los demás.

Con este proyecto se le está aportando al país, una ciudadanía más sensible y que aprende a valorar las cosas, no de una manera material sino más intelectual, ya que el arte no es más que la expresión del intelecto de múltiples formas que puedan llegar a los demás, con este programa se le está brindando a los niños y jóvenes herramientas  que les permitirá ser ciudadanos de bien, ciudadanos éticos pero no llegaran a esto por imposición, sino porque reconocen por si mismos que es necesario y que si todos manejamos un código ético personal basado en el bien y en el compartir, así llegaremos a ser en realidad hombres y mujeres evolucionados.

En este tiempo trabajando en el programa, he visto como la burocracia frena muchísimo los procesos y tenemos muchos requisitos que llegan a ser muy molestos, yo recomendaría que se aprovechen más las herramientas tecnológicas modernas para facilitar estos procesos, como por ejemplo en el llamado de listas, que se puede realizar a través de alguna aplicación que envié los datos en tiempo real, no me parece nada lógico que estemos realizando este trabajo en papel y que además se presta para que cada mes se tengan que pasar las listas varias veces repetir la misma información una y otra vez.

  Este año que he pasado realizando este trabajo, ha sido muy importante para mí de manera personal, me siento muy agradecido a la Asociación Lyndon LaRouche y al programa 40x40 por haber tenido la oportunidad de ser parte de esto, de ofrecer un poco que sumado a todo el trabajo de los demás artistas y personas vinculadas al proyecto, ofrece unos resultados muy bonitos y alentadores para el futuro de la juventud de  esta ciudad.